Bnext, uno de los neobancos españoles con mayor proyección, decidió embarcarse en el lanzamiento de su propio token, B3X. Otro token más entre los cientos de tokens que ya existían en el mercado.
Todo ocurrió en un momento en el que las criptomonedas y su rentabilidad estaban en boca de todos. El reto estaba claro: comunicar por qué B3X sí es una criptomoneda útil y segura para invertir.
Después de estudiar a nuestro target, nos dimos cuenta de que para convencerles teníamos que hablarles en su propio idioma: a través de los números.
Bajo el concepto, “Nuestros números hablan por nosotros” creamos una estrategia que aplicamos a cada uno de los formatos y canales, hasta que al final, los números, hablaron por sí solos.